Los residuos sólidos urbanos o más conocidos por sus siglas como RSU, son todos aquellos desechos que se producen en los ambientes urbanos, los cuales pueden ser tanto domésticos, como empresariales, institucionales o industriales. Dentro de los residuos sólidos urbanos no están incluidos aquellos en estado líquido o gaseoso. Debido a que la generación de estos desechos es muy grande, es muy importante su valorización.
Ecoembes asegura que cada persona española genera 442 kilogramos de residuos al año, aunque la cifra es un 9% más baja que la media europea, esta sigue siendo alta.
La demografía va en aumento y cada vez hay más personas que generan gran cantidad de residuos diariamente. Debido a malas gestiones o a problemas de espacio en los vertederos o puntos de disposición final de residuos, estos desechos acaban siendo muy perjudiciales. Los problemas no se reducen solo al medioambiente, sino que se extrapola a todos los seres vivos, incluyendo a los humanos, ya que es el espacio donde se desarrolla su actividad.
TIPOS DE RESIDUOS SÓLIDOS URBANOS
Los residuos sólidos urbanos se pueden clasificar en tres categorías:
- Residuos orgánicos: compuestos a partir de la naturaleza y con una descomposición más rápida. Estos pueden transformarse en materia orgánica como compost o fertilizante natural.
- Residuos inorgánicos: son aquellos desechos artificiales y con composición química los cuales tardan mucho más que los orgánicos en descomponerse.
- Residuos peligrosos: contienen sustancias químicas, ácidos, elementos corrosivos o sustancias radiactivas. Debido a su composición suponen un peligro para la salud, por lo que son tratados en plantas especializadas y con una gestión diferente. Suelen ser producidos en empresas o ámbitos industriales.
GESTIÓN DE RSU
La gestión actual de los residuos sólidos urbanos implica la recogida, el almacenamiento, transporte y eliminación o transformación en caso de ser posible.
La gestión de los RSU se lleva a cabo en plantas de reciclaje, donde son sometidos a diferentes operaciones y tratamientos controlados. Algunos de estos tratamientos son la disposición de este en relleno sanitario, la incineración o la separación y el aprovechamiento.
La gestión de los residuos empieza por la separación hecha por las propias familias o personas haciendo uso de los contenedores a disposición pública, aunque la tasa de reciclaje y reutilización de residuos urbanos en España aportados por la UE es solo del 34,7%.
Tras la separación, se recoge y transporta a las plantas de tratamiento o vertederos correspondientes, donde luego se realizará el tratamiento necesario. Debido al escaso reciclaje realizado en la separación previa, muchas plantas de tratamiento o gestión de RSU cuentan con un primer apartado de manejo y separación. En este apartado se hace pasar los desechos por una selección que clasificará los residuos en: a eliminar o a recuperar o tratar.
Esto hace que el verdadero porcentaje de residuos sólidos urbanos que se recicla sea solo el 43,3% mientras que el 56,7% se destina a vertederos, incineración o se extravía contaminando el entorno.
IMPACTO DE LOS RESIDUOS SÓLIDOS URBANOS
Según un estudio del Centro Nacional de Investigación y Capacitación Ambiental, los residuos sólidos urbanos que terminan en vertederos o en rellenos sanitarios emiten una gran cantidad de metano (CH4) y dióxido de carbono (CO2), entre los más contaminantes, son los gases de efecto invernadero (GEI) más producidos y que más están impulsando el calentamiento global en todo el planeta.
La disposición final en vertederos de estos residuos también favorece la aparición del lixiviado. Es una sustancia resultante de la descomposición de los desechos, mezclada con el agua de lluvia, la cual es altamente contaminante y que se filtra por el suelo llegando en ocasiones a fuentes de agua y contaminándolas también.
La contaminación constante de la tierra, el agua y el aire trae muchos problemas tanto al medioambiente como a la salud:
- Poblaciones con agua y alimentos contaminados.
- Animales y plantas muriendo y en estado de extinción en algunos casos.
- Reducción considerable del nivel de vida.
- Movilidad de poblaciones enteras debido a las malas condiciones de vida.
- Aparición de epidemias y enfermedades atraídas por las sustancias y los desechos.
- Migración de especies animales a otros ecosistemas, alterando ambientes enteros.
Debido a estas fatales consecuencias se deben implementar medidas y buscar la valorización de los residuos sólidos urbanos, para así reducirlas.
VALORIZACIÓN DE RESIDUOS SÓLIDOS URBANOS
Como métodos de aprovechamiento y valorización de los residuos urbanos, desde Landfillsolutions proponemos los siguientes:
- Termólisis (MERIÓLISIS): La termólisis es un proceso mediante el cual los residuos se someten a temperaturas muy altas sin llegar a permitir que se produzca combustión, con el fin de eliminar el desecho. En Lansdfillsolutions ofrecemos la MERIÓLISIS, que limpia y aprovecha los gases en vez de liberarlos.
- REVASTEX: para el tratamiento a residuos orgánicos para conseguir bioetanol y agua destilada.